
La vuelta a casa hizo que me tumbara en la cama y que no saliera de casa durante unos días.
Mi mejor amiga Lea hizo que volviera en mi, ayudándome a reorganizar todo. Le conté todo lo ocurrido y sobretodo los mejores momentos de mi vida, con el.
Entonces empezaron las clases, el duro trabajo volvía. Y así una semana, dos, tres... 1 mes y medio. No había mantenido casi ningún contacto con él, quizás unos cuantos sms y algún correo contándonos nuestra "dura" vida. Hasta que llegados los dos meses y medio una gran sorpresa que hizo que toda mi vida diera una vuelta de tuerca.
- ¿Qué? No puede ser...
+ Sí, es posible.
- No me creo que él haga algo así, y menos, por mí.
+ Si no te lo crees asómate a la ventana.
Me asomé asustada, sin saber que decir en cuanto lo viera. ¿Cómo podía haber venido desde Londres? Y lo más inimaginable, ¿venir por verme a mi?.
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