El tiempo pasa tan rápido cuando tu vida es tan enormemente feliz y tan lento cuando te falta esa felicidad...
Queda nada para volver a verle. Hemos quedado a las 8:15 en la estación del metro, así podré acompañarle al estadio y pasar tiempo con él.
Aún no puedo creerme que estemos tan cerca, pero tengo tanto miedo de que algo interrumpa nuestras vidas, que intento pensar menos en nuestro amor e intentar así aprovechar el tiempo, pero es tan difícil. Es muy difícil luchar contra lo que más quieres, aunque lo conozcas desde hace poco, pero es una de esas personas que en cuando la miras, sabes que será para siempre. Sabes que él es para siempre. Pero siempre está la pequeña duda que corroe tu cabeza: ¿siempre será siempre? Nunca se puede responder con un Sí que sea absolutamente cierto.
Nada más vernos nos fundimos en un agradable abrazo que hizo que me olvidara de los pequeños problemas de la vida. Llegamos al metro y nos adentramos en aquellos túneles. Nada más 15 minutos después ya habíamos llegado al centro. No nos costó divisar el estadio ya que estaba muy cerca y también por su enorme estatura. Entramos y el querido entrenador ya estaba esperándolo en la entrada.
- Ho... -El entrenador le dejó con el hola en la boca.

- Si entrenador, perdone. -Me estaba diciendo lo siento con la mirada, así que asentí para que supiera que lo entendía.
Entró dentro del vestidor para cambiarse mientras yo deambulaba por allí.
Más tarde alguien se acercó. Me parecía conocido, pero con aquella vestimenta no sabía muy bien quien era.
- Hola Nayara, ¿te acuerdas de mí? -Me dijo aquél chico que me sonaba tanto.
+ Carlos, ¿eres tú? -¿Como no iba a conocerle? Era Carlos mi antiguo noviazgo de cuando iba a mi último año de instituto.
- Si, soy yo, ¿qué tal estas? Si que ha pasado el tiempo... ¡estás espectacular!.
+ Si, después de 2 años todo, o casi todo el mundo cambia... a ti te veo igual, quizás un poco más de barba ¿no? ja ja, -Me sentía extraña después de tanto tiempo volver a encontrarnos y hablar con tanta normalidad.- pero bueno mi vida sigue siendo igual que antes, bien, estudiando en la uni, ¿y tu qué tal?
- Todo perfecto, después de acabar 2º de Bachiller conseguí una beca para seguir con el baloncesto. Ya sabes que pasaba las tardes en el equipo aunque, antes era solo por diversión... -¿Me gustan los chicos que juegan al baloncesto o es otra casualidad?- pero decidí dar el paso a la competición. Y tú, ¿sigues con tu idea de ser escritora? después de tantos oficios que querías al final te asentaste ¿no?
+ Si, sigo queriendo serlo, aunque también quiero sacarme un ciclo de fotografía, ya sabes que me apasiona, je je, pero bueno ahora estoy en mi segundo año de periodismo para sacarme una carrera que me ayude a mi propuesta de ser escritora. -Entonces Hugo apareció por detrás dándome un buen apretujón.- ¡Hola Hugo! Te presento a Carlos, es un amigo del instituto...
- Hola Carlos, encantado.
- Igualmente, bueno ya me voy a ir, tengo que entrenar. Me alegro de haberte visto otra vez Nay, espero que todo te vaya genial.
+ Muchas gracias Carlos, igualmente, espero volver a verte, quizás por aquí ¿no?
- Si, seguramente que me veas por aquí, adiós.
+ Adiós -Dijimos a la vez Hugo y yo.
Después de la despedida entramos dentro para que él pudiera entrenar.
Gracias por pasarte por mi blog :)
ResponderEliminarMe gusto mucho la entrada, voy a
seguir leyendo :3
Bso, cuidate :)