IX - Días.

Después de un mes...
He vuelto a hablar con él, hacía ya una semana que no hablábamos. Ahora está en Praga, compitiendo con su equipo. Parece mentira que se me pasara el tiempo tan rápido, lo bueno es que ganaron, aunque eso tuviera una buena consecuencia: partir de inmediato.
Tras los días consecuentes a San Valentín, fueron más de lo mismo. Nos veíamos 45 minutos antes de cada entrenamiento y otros antes de que yo me marchara a estudiar. Hasta que por fin llego el día del "todo o nada".
+ ¡Muchísima suerte! -Le dije alegre y nada más terminar la frase le di una precioso beso en los labios.
- Wow, gracias mi amor, pero no hace falta que me la desees, si tu estás aquí, tendré suerte suficiente.- Y me devolvió el beso fugaz.
Y tan rápido pasó el momento que no nos dimos cuenta de que el entrenador llegó y clamó:
- ¡¡Adentro Hugo!! 
Y tan pronto él entro yo me fui a las gradas donde quizás algo o alguien me esperaba...
- ¡Hola! -Me dijo una dulce voz detrás mía.
+ ¡Hola Andrea! -La pude reconocer a pesar de casi no verla tras unas grandes gafas que llevaba puestas.- ¿Qué tal?
- Muy bien, estoy aquí para animar a Carlos que hoy compite, ¿y tú que tal?
+ Perfectamente bien, y también estoy aquí para verlo, a Carlos no, porque no sabía que competía, pero a Hugo si. -Que extraño, ¿compiten juntos o en contra?- Oye por cierto, ¿en qué equipo juega Carlos?
- En el "Águila Dorada", y Hugo, ¿sabes si juega con él?
+ No, el está en el "MU London", ¿así que están jugando uno en contra del otro? Ja ja, no me lo puedo creer, pues, esperemos que acaben bien.
- Si, ja ja ja, esperemos.
El partido duró unos 40 minutos, y después una prologa de unos 8 minutos. Quedaron empate hasta que al final, hubo un gran remate que decidió dar por vencedor al equipo "MU London". 
Los combatientes alegres recibieron la Copa y entraron sonrientes a las duchas. Tras varios minutos de espera abracé fuertemente a Hugo, y él me besó como nunca lo había hecho. 
Después de aquello solo me queda el recuerdo de la triste despedida... Un beso rápido antes de su ida hacia Praga.
Y hoy la cálida y suave voz volvió para quedarse en mi mente, otra vez.
Me ha llamado para decirme que sus entrenamientos van viento en popa y que pasado mañana es la final. Esperan llevarse otra Copa a Londres.
Pero no puedo pararme a pensar en él, tengo que estudiar ya que mañana empiezo los duros exámenes. Espero que a mi también me vaya igual de bien.

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