Eres como una moneda pero, contigo no se puede elegir.


¡Qué tonta he sido todo este tiempo! Por fin estoy descubriendo la sencillez de la vida ya que me he dado cuenta de muchas cosas.
Gracias por ayudarme a entender cómo eres porque, ahora ya sé en qué no debo convertirme. He tenido una venda en los ojos todo este tiempo que no me dejaba ver con claridad tu doble cara. Pero a pesar del tiempo transcurrido, me alegro, y mucho.
No voy a guardarte rencor, y quizás llegue a perdonarte, pero está claro que nunca lo olvidaré, a pesar de los años que pasen las cosas no se borran así porque sí.
Estoy convencida de que por más que conozcas a una persona por mucho tiempo, un simple instante puede cambiar todo lo que creías respecto a ella. Incluso una simple acción.
Doble decepción en una semana, ¡qué ilusión!

No hay comentarios:

Publicar un comentario