Punto y aparte.

   Estoy cansada de que la almohada sea cómplice de mis lágrimas derramadas por ti. Cansada de intentar hacer algo por esta situación y que nada fluya. Cansada de tu inmadurez, de tus tonterías y de ti mismo. Basta ya. Mi paciencia tiene un límite. 

   Y es que las decepciones no cesan. Es una tras otra. Y ya no solamente tú, mi amor de verano. Sino con las personas que comparten mi día a día. Estoy muy cansada de amargarme la vida por vuestras gilipolleces. De amargarme por las amistades falsas, de las mentiras y de las promesas. Solo creo en las personas que me ayudan en este camino que es mi vida. Solo en ell@s. Porque... ¿para qué más falsas ayudas? ¿para qué arrancarme la pequeña felicidad que logran florecer otros? Para nada. Y eso es, punto y aparte una vez más. Poco a poco las pequeñas cosas salen a la realidad y te das cuenta de cómo es la gente. Me alegro. Así sustituiré al fin ese "dolor" por una "alegría". Ahora voy a tomarme enserio los consejos que me dan: ‎"Sonríele a tus enemigos y hazles saber que ellos no te pueden derribar; es una dulce venganza." Gracias por el empuje, siempre viene bien una mano amiga y no personas que te cogen el brazo entero.

GOODBYE.

"Jamás esperes mucho de aquellos que prometen demasiado. 

Es mejor parecer sorprendido que decepcionado."

@ifilosofia