Good morning!

   Me he despertado con ganas de más. De mirar directamente al sol y decirle que ha empezado un nuevo día y este día es mejor que cualquier otro. Ser un "yo contra el mundo", ¿un "yo contra el mundo"? Mejor un "nosotros contra el mundo". Romper esquemas y descubrir cosas nuevas. Caminar por encima de errores y pensar que todo ha sido aprendido.
   La felicidad solo te acompaña cuando tú te empeñas en que aparezca y te coja de la mano. Nada es fácil ni totalmente bonito, por eso hay que sonreír aunque todo esté demacrado y no veas luz. Bueno, la luz está ahí, esperando a que apartes las cortinas o subas las persianas. Ella siempre está esperando. Después de la noche ocura, ella sale a decirle hola a todo el mundo. Eres tú quien decide si mirarla directamente, como he hecho yo, o seguir atrapado en la oscuridad.
   -Hola.
   -¿Por qué? 
   -Porque no importa que haya cien días malos, te tengo aquí, ahora, y eso es lo que importa.

3 comentarios:

  1. Me ha hecho gracia encontrarme con tu blog. Yo me hago llamar Kryptonite por estos lares. :)

    Has relatado un texto con fuerza y mucha, mucha energía. Me han entrado ganas de salir a la calle y comerme al mundo. (El diálogo final me ha encantado).

    ¡Un beso!

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  2. Me encantan los textos así, positivos. Te sigo linda, y me voy a seguir pasando por acá.

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  3. Jopé, qué bonito, es un relato que transmite muchísima fuerza y energía, me ha contagiado incluso una sonrisa haha :)

    Por cierto, me ha gustado como has dejado el blog, bueno, los pequeños cambios que has hecho y eso ^ ^

    ¡besitos!

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